¿Porqué la relación entre el mundo empresarial y social no es estratégica?
Nunca se puede generalizar, pero en general desde mi experiencia en ambos mundos primero como alto directivo empresarial durante más de 20 años trabajando con la mayor parte de las empresas del IBEX 35 y en la actualidad como fundador de Helping by Doing Foundation desde hace casi 5 años. Siento la enorme dificultad que tiene lograr que la vinculación sea estratégica entre el mundo empresarial y social.
Denomino estratégica donde las organizaciones invierten su tiempo y dinero (también es aplicable a la estrategia personal).
¿Porqué la relación entre el mundo empresarial y social no es estratégica?
Primera conclusión, es cultural:
Nos han enseñado desde niños a tratar a lo social de una manera exclusivamente filantrópica: a donar dinero o materiales; o a donar tu tiempo como voluntario. No hay más opciones (o al menos eso nos habían enseñado).
Segunda conclusión, es miedo a mezclar los objetivos empresariales estrategicamente con los fines sociales:
Hace unos 15 años altos directivos me decían que me daban permiso para hacer con sus equipos o clientes “casi” lo que quisiera en sus eventos corporativos. La verdad que era un gran halago y así lo hacia, los embarcaba en jornadas de supervivencia en el amazonas con militares brasileños o les hacia encontrar los siete pilares de la sabiduría en el desierto de Wadi Ruum, pero casi aterrorizados me decían que ¡como se me podía ocurrir querer incluir actividades sociales en sus eventos!. Y eso que les hablaba casi exclusivamente de los beneficios empresariales de dichas acciones, pero nada, no había manera.
Para ser realista hay que decir que alguna vez si conseguí hacer pequeños guiños con impacto social, y siempre fue lo más destacado de dichos eventos, como la escuela que comenzamos a levantar hace ya 18 años en Masai Mara durante un Viaje de Incentivo o la biblioteca en Ushuaia.
Pero uno que es perseverante cuando cree en algo, mejor dicho cuando ha comprobado en repetidas ocasiones el gran valor de ese «algo». Buscando respuestas ideé el ahora reconocido Día Solidario de las Empresas (liderado y desarrollado por la Fundación Atresmedia y Cooperación Internacional) con el único fin de que las empresas tomaran conciencia de los beneficios empresariales (y sociales) de ese contacto con el mundo social.
Al menos en España se ha conseguido avanzar mucho en el campo del voluntariado corporativo, pero sigue siendo filantrópico, no estratégico. El voluntariado es un gran medio, no un fin.
Además no son muchas las organizaciones que dedican tiempo de su horario laboral a realizar actividades de voluntariado, y menos las que dedican un presupuesto “digamos acorde» a ello. Es decir, ni tiempo, ni dinero.
En realidad por definición, pienso que lo voluntario nunca podrá ser estratégico, este es un pensamiento muy personal.
Como dice Antonio Rivas de la Fundación Proyecto Esperanza “El voluntariado no es un servicio prestado. Es promoción de Derechos. El voluntariado no necesita tu tiempo libre, necesita tiempo liberado para darse “entero” sin ansiedad. El voluntariado no es un proceso de asimilación, es un proceso de intercambio…»
Amo el voluntariado pero desde este lugar.
La primera conclusión va ligada con la segunda y esta segunda nos lleva a una tercera.
Tercera conclusión, por desconocimiento:
Las empresas no saben lo que se pierden al no interrelacionarse estratégicamente con el mundo social en todos los sentidos, sobre todo en términos de rentabilidad ¡lo desconocen!. Si la RSC fuera transversal se enriquecerían cada uno de los departamentos, si fuera estratégica impulsaría la rentabilidad de la empresa.
Igualmente las organizaciones sociales están acostumbradas a vivir de la filantropía y en general no saben generar recursos propios. Desconocen sus grandes valores, su enorme potencial al tener la experiencia a diario de trabajar con los más desfavorecidos, con las máximas dificultades. Desconocen su capacidad para generar recursos.
Cuarta conclusión, por liderazgo:
Como dice Francisco Alcaide Hernández, Patrón de Helping by Doing Foundation, conferenciante y autor del bestseller «Aprendiendo de los Mejores»…
Con lo cual nos encontramos con cuatro condicionantes claros: cultural, miedo, desconocimiento y liderazgo.
¿Cómo avanzar?
Si hace años cree el Día Solidario de las Empresas, ante lo comentado ideé un foro llamado La Pirámide Responsable donde se definen los cuatro pasos de la vinculación entre el mundo social y empresarial: Donaciones, Voluntariado, Eventos Responsables y Proyectos Responsables. Es la Pirámide de Maslow transformada en la relación entre la empresa y la sociedad.
Son los cuatro pasos que nos indican el camino a seguir para avanzar desde la filantropía hacia la estrategia en las organizaciones, para alcanzar una relación más colaborativa, más compartida, para lograr una mayor rentabilidad, un mayor compromiso y oportunidades en ambos mundos por igual.
Finalmente hemos creado la Red de Empresas Helping by Doing donde juntos deseamos seguir aprendiendo para realizar esta transformación desde lo filantrópico a lo estratégico.
Nuestra Red de Empresas actualmente está formada por:
- Premium: Grupo Ausolan.
- Colaboradores: Cofares, Universidad San Pablo CEU y Staff Eventos.
Se que algún día veremos como las empresas añaden habitualmente a sus eventos el apellido de Responsable y como las entidades sociales hacen valer todo su inmenso y bello potencial.
Antonio Mateo Santana